Como se nota que la/as persona/as que hace la ley de conciliación familiar, no tienen que salir de casa como yo está mañana, con un niño en un carrito, cayéndome una manta de agua en dirección a casa de su abuela, para poder ir a trabajar.
Sí fuera así, probablemente no hablaríamos de conciliación familiar.
Porque no habría conciliación familiar como la conocemos ahora. Hablaríamos de familias felices. Sin estrés, sin horarios asfixiantes, con sueldos de mierda, impuestos por pañales desorbitados o vida familiar 0.
Debemos hacer presión desde todos los colectivos de madres, para que esto de la conciliación familiar cambie de una vez.
No me gusta sentirme mala madre, cada vez que he de irme a hacer mi trabajo y tengo que dejarlo. #conciliaciónfamiliarrealya
#quieroestarconmihijomástiempo
Espero que paséis una gran semana. ¡¡Preparad las capotas que viene agua!!
Carpe Diem.
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